-
22 agosto 2022
Posteado en : Opinión
Peggy Martinello es la Directora del Área de Administración Pública y Asuntos Sociales en la FIIAPP. Parte de su trabajo consiste en promover políticas específicas de migración en el mundo, incluyendo esa mirada en cada una de las normas, leyes y políticas sociales que se impulsan. Ella, como persona también migrante reflexiona ahora sobre su propia experiencia y sobre la importancia de construir y compartir políticas públicas para mejorar la vida de las personas
Soy francesa y llevo casi dos décadas viviendo en España. Soy migrante, extranjera, pero he tenido la enorme suerte de tener el respaldo de un marco legal que me ha permitido instalarme, estudiar, trabajar, acceder a los mismos derechos y servicios públicos que cualquier ciudadana española.
Antes que yo, mis abuelos maternos también migraron, desde el Portugal rural pauperizado de los años 50, a una Francia en plena expansión económica tras la II Guerra Mundial. Al igual que mis bisabuelos paternos, que huyeron de la Italia fascista de los años 20. Ellas y ellos no tuvieron tantas oportunidades, ni en su ruta migratoria, ni en su acogida, ni en su integración. Me recuerda constantemente la importancia de la institucionalidad y de las políticas públicas que, desde el espacio territorial, es necesario construir y compartir con otros para mejorar los sistemas.
La migración es una oportunidad y la cooperación un eje para articular sociedades e instituciones en países de origen, destino y tránsito. Es esta cooperación descentralizada un espacio privilegiado para aportar a la construcción de respuestas operativas a los desafíos de la movilidad humana.
Hay tres elementos que me parecen particularmente importantes a la hora de analizar la realidad migratoria. Estos son la multidimensionalidad del fenómeno; la necesidad de salir de marcos analíticos lineales que asocian, por ejemplo, desarrollo económico en países de origen con reducción de movimientos migratorios; y, por último, la importancia de la coherencia de políticas.
Además, hay otra perspectiva que me gustaría plantear: la importancia de la cooperación técnica pública, basada en la experiencia de gestión pública, en particular a nivel territorial.
Creo que es especialmente relevante abordar respuestas a los desafíos de la movilidad desde el nivel territorial porque es el espacio de proximidad, donde se hace tangible la atención a personas migrantes, su protección, su inclusión, donde se encuentran las diásporas que trabajan con los países de origen, donde se conectan los servicios públicos, donde se desarrolla la educación y la formación para el empleo.
En este sentido, el rol de la cooperación descentralizada cobra mucho sentido, pues puede tejer en torno a su valor añadido territorial. O dicho de otra manera: los entes territoriales pueden orientar su cooperación en aquellos ámbitos de gestión pública donde tienen mayor expertise o experiencias.
Peggy Martinello. Directora del Área de Administración Pública y Asuntos Sociales en la FIIAPP
-
07 octubre 2021
Posteado en : Opinión
‘La FIIAPP debe constituir su visión de digitalización con enfoque humano, sin concebir la digitalización como un fin en sí mismo, si no como una palanca para ayudar más y mejor a la ciudadanía’.
En el siglo XXI, las tecnologías digitales están cambiando profundamente las sociedades, la vida cotidiana y las formas de trabajo. Todo ello se dinamizó como respuesta a la crisis del Coronavirus (Covid-19) que puso de manifiesto la necesidad de aumentar la coordinación de los esfuerzos internacionales, tanto para aprovechar las ventajas de la era digital como para gestionar sus posibles obstáculos.
En este sentido, la Unión Europea ha emprendido un camino para la transición verde, justa y digital de tal manera que el Pacto Verde Europeo y las respuestas a la crisis sanitaria han estado vinculadas a la sostenibilidad y a la digitalización. El objetivo es dar forma a economías digitales que pongan a las personas en el centro, protejan los derechos fundamentales de la ciudadanía y ofrezcan igualdad de oportunidades a todas y todos. Por su parte, España ha legislado para acelerar los procesos desde las carteras de Transición Ecológica y Digitalización e Inteligencia Artificial.
La principal respuesta de la Comisión Europea en el sector digital fue la puesta en marcha del D4D Hub, (Centro de Digitalización para el Desarrollo), que inauguró una nueva era para la cooperación mundial en materia de desarrollo digital. El D4D Hub implementa la “2030Digital Compass: the European way for the Digital Decade» con un enfoque Digital4Development , esta nueva visión tiene como objetivo promover nuevas asociaciones internacionales en materia de transformación digital como #TeamEurope.
España es una de los 11 Estados Miembros parte del D4D Hub y la FIIAPP, como Fundación estatal pública de la cooperación española y europea ha sido miembro activo de las distintas comisiones de Hub durante el último año. El D4D Hub reúne a Estados miembros europeos y las agencias implementadoras, la CE, el Banco Europeo de Inversiones y las instituciones financieras europeas, las organizaciones de la sociedad civil, el mundo académico y los socios del sector privado. El Hub aspira a establecer asociaciones digitales estratégicas e impulsar inversiones conjuntas entre Europa y los países socios de todo el mundo que contribuyan a reducir las brechas digitales, incluida la brecha digital de género, garantizando un enfoque basado en los derechos humanos para un desarrollo sostenible.
Digitalización con enfoque humano
Sin embargo, la FIIAPP debe constituir su visión de digitalización con enfoque humano. Es decir, no concebir la digitalización como un fin en sí mismo, si no como una palanca para ayudar más y mejor a la ciudadanía. La digitalización transformará y aumentará nuestro impacto en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)¹ y nuestras actuaciones en los proyectos en los que participamos. Nuestra principal tarea será poner en contacto a los diferentes actores del sector para estimular el intercambio de conocimientos y crear asociaciones innovadoras para «Poner a las personas en primer lugar”. Una estrategia D4D deberá ir en línea con la Cooperación Española y todos sus actores y en estrecha cooperación con nuestros socios internacionales, la Comisión Europea, otros Estados miembros de la UE, organizaciones multilaterales, bancos de desarrollo etc.
Dado que la digitalización crea tanto oportunidades como retos que trascienden las fronteras, la cooperación internacional es una dimensión clave para aprovechar al máximo la transformación digital a nivel local, nacional e internacional. Desde la FIIAPP utilizamos y entendemos que las herramientas digitales pueden dotar a los Estados de nuevas capacidades y hacerlos más creíbles, inclusivos, eficientes e innovadores lo cual se encuadra. Sin embargo, la transformación digital también conlleva riesgos para el desarrollo inclusivo, el aumento de las disparidades entre los países y dentro de ellos, la ampliación de las brechas digitales, la automatización de los puestos de trabajo y los problemas de seguridad y privacidad. De ahí la importancia de poner al ser humano en el centro del desarrollo de la digitalización.
La digitalización puede desempeñar un papel importante en todos los sectores en los que actúa la FIIAPP. Esto incluye la salud, la educación, la agricultura y la seguridad alimentaria, las infraestructuras básicas, el agua y el saneamiento, la gobernanza, la protección social, los servicios financieros y otros. También puede contribuir a los objetivos transversales en materia de género y medio ambiente. A través del área de Desarrollo Económico y Medio Ambiente se está construyendo una Estrategia de Digitalización y aportando activamente para la constitución del D4D Hub América Latina.
Empecemos este nuevo camino digital y sostenible mejorando sistemas públicos para las personas y el planeta.
Alba Rodríguez Díaz, Técnica de Proyectos Área de Desarrollo Económico y Medio Ambiente.
—
¹ La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible subraya la importancia de las tecnologías de la información y la comunicación en los países en desarrollo como potentes facilitadores del crecimiento. La referencia a las TIC puede encontrarse explícitamente como una meta en el ODS 9 «Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación», mientras que las TIC también se mencionan en las metas relacionadas con el cambio climático (ODS 13, 14 y 15), la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres (ODS 5), el desarrollo del sector privado (ODS 8), la educación (ODS 4) y la salud (ODS 3).
-
23 abril 2021
Posteado en : Reportaje
Ante los retos de un mundo cada vez más complejo y globalizado, es el momento de reforzar el compromiso por el multilateralismo y la diplomacia. La cooperación, el diálogo y la creación de espacios comunes de trabajo y entendimiento entre actores internacionales es el único camino posible para hacer frente a los retos del presente y del futuro.
A pesar de que ahora es frecuente que varios países afronten de forma conjunta retos globales, este es un fenómeno relativamente nuevo. La primera apuesta por el multilateralismo hay que buscarla hace apenas un siglo, en 1919, con la creación de la Sociedad de Naciones. Este primer intento no fue muy exitoso y ya anunciaba las dificultades que pueden surgir cuando hay que dejar de lado los intereses nacionales por una causa mayor.
Durante las últimas décadas el escenario geopolítico ha sufrido grandes transformaciones como el desplazamiento de los centros de poder hacia Asia y el Pacífico, la pérdida de hegemonía de EEUU, la aparición de nuevos actores o el cuestionamiento de instituciones internacionales como la OMS, la OCDE o el FMI. Vivimos en una época de fragmentación y volatilidad en la que los nacionalismos, el individualismo y la desconfianza cuestionan el progreso hacia un mundo más interconectado, global y solidario. Esto hace esencial que actores como la ONU, la Unión Europea o los propios Estados refuercen su compromiso por el multilateralismo para hacer frente a los retos del presente y del futuro. Empezando por la recuperación de una pandemia mundial que nos ha recordado la importancia de la globalización y la necesidad de regular los retos globales.
La ONU lleva 75 años apostando por el multilateralismo. Un claro ejemplo de este compromiso son la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Estos objetivos comunes a los que se han comprometido todos los países miembros de la ONU abordan temas complejos que trascienden fronteras como el cambio climático, la erradicación de la pobreza o la reducción de las desigualdades.
Entre todos los ODS, el número 17 “Alianzas para lograr los Objetivos” es, quizás, el más relevante. A pesar de ser el último de la lista, es imprescindible para la consecución del resto de objetivos. Las alianzas internacionales y el multilateralismo son la base para garantizar una respuesta conjunta a retos que a nivel nacional son inabarcables.
Como proceso de integración más avanzado a nivel global, la Unión Europea es uno de los actores más comprometidos con el multilateralismo y el fortalecimiento de las alianzas internacionales. A principios de este año la Comisión Europea presentó una nueva estrategia para reforzar la contribución de la UE a un multilateralismo basado en normas y valores universales.
En esta estrategia, la Unión Europea establece el diálogo, la gobernanza multilateral y la cooperación internacional como prioridades estratégicas imprescindibles para garantizar un mundo más seguro y una recuperación mundial sostenible e inclusiva. La Unión Europea tiene claro que la cooperación y el trabajo conjunto como Equipo Europa es el único camino posible.
El compromiso de la Unión Europea con el multilateralismo cuenta con el firme respaldo por parte de España. La Estrategia de Acción Exterior 2021-2024 presentada a finales de enero incluye como uno de sus cuatro ejes sustantivos la integración regional y el refuerzo del multilateralismo. España tiene la voluntad decidida de contribuir a la mejora de los mecanismos de gobernabilidad global apoyando procesos de integración e impulsando un multilateralismo más integrado, eficaz y reforzado.
Tanto la Unión Europea como España incluyen la cooperación internacional como una herramienta fundamental para alcanzar estos objetivos. Desde la FIIAPP, a través de la cooperación técnica pública, se trabaja para acompañar procesos de reforma de políticas públicas, pero, también, para generar espacios de confianza y alianzas entre administraciones.
A través de los programas regionales en los que participa la Fundación, se están generando respuestas armonizadas frente a retos compartidos. Esto genera estándares, políticas y valores comunes y fomenta el acercamiento en foros internacionales en favor de una gobernanza multilateral y del desarrollo sostenible en beneficio de la ciudadanía.
La FIIAPP apuesta firmemente por el multilateralismo, el diálogo y el trabajo conjunto entre actores de todo el mundo. La cooperación técnica pública ofrece la oportunidad de favorecer el diálogo y el intercambio de experiencias, así como de consolidar no sólo relaciones entre instituciones públicas sino vínculos compartidos entre ciudadanos de todo el mundo.
-
30 mayo 2019
Posteado en : Entrevista
Entrevistamos a Jérémie Pellet, director general de la agencia de cooperación Expertise France, socia de la FIIAPP en muchos proyectos y miembro de la red Practitioners’ Network
¿Qué es Expertise France? ¿En qué consiste su trabajo?
Expertise France es la agencia pública francesa para la cooperación técnica internacional, creada en 2015, fruto de la fusión de varios operadores. Se centra en cuatro grandes campos; en el campo de la gobernanza democrática: económica y financiera; en el campo de la paz, de la seguridad y de la estabilidad; en el campo del desarrollo humano: educación, salud, protección social; y en el campo del desarrollo sostenible: clima, agricultura y energía.
¿Cuál es la importancia del trabajo conjunto entre instituciones como la FIIAPP y EF?
Expertise France y la FIIAPP son dos instituciones que comparten el mismo objetivo: apoyar las políticas públicas y apoyar el desarrollo de los países del sur, sobre un plan de buena gobernanza. Así que, nosotros trabajamos juntos, ya, en muchos proyectos. Hoy en día, Expertise France y la FIIAPP, comparten una docena de proyectos. Nuestra ambición es que seamos un actor aliado en Europa. Así que, nosotros desarrollamos la colaboración con las agencias que son como nosotros, capaces de movilizar, en distintos países, la expertise; y particularmente, la expertise pública que es nuestra principal razón de ser, tanto de la FIIAPP, en España, como de Expertise France, en Francia.
¿Cuáles son las cosas buenas y… malas de trabajar conjuntamente?
Las ventajas de trabajar en común son que, de entrada, nosotros desarrollamos un enfoque que no es solo nacional sino también una aproximación europea, con diferentes maneras de trabajar y, evidentemente, este enfoque tiene una gran ventaja ya que requerimos de financiación europea, y la Comisión Europea está muy interesada en que las agencias de desarrollo internacional trabajen en común.
Los inconvenientes son, esencialmente, las dificultades en la coordinación entre nosotros porque cada uno tiene su forma de trabajar y sus procedimientos. Una de las cosas que podemos mejorar es, ciertamente, reducir esta dificultad para que la coordinación sea más fluida y eficaz.
¿Qué cree que aporta Francia a estos proyectos? ¿Y España?
Francia y España son dos países que tienen muchos proyectos de cooperación, que consagran una parte importante de su actividad internacional y de su actividad diplomática en los sujetos de la cooperación internacional. Son geografías que son mundiales, que no se sitúan, obligatoriamente, en el mismo centro de interés prioritario debido a sus diferencias históricas. La cooperación internacional española está muy orientada a las políticas de América Latina, mucho más que la cooperación internacional francesa que está enfocada, preferentemente, hacia los países más pobres de África y, particularmente, de África del Oeste. Pero esto no es óbice para que hoy encaremos temas climáticos, de seguridad o de desarrollo que son globales y que se tienen que apoyar en las distintas geografías. Al final somos bastante complementarios porque cada uno aportamos lo que mejor conocemos y, adicionalmente, la expertise en los proyectos de cooperación.
¿Qué valor tiene la red europea de cooperación, Practitioners’ Network, en el marco de la cooperación europea?
Practitioners’ Network es el órgano que reúne las agencias de los estados de la Unión Europea sobre los sujetos de gestión de fondos delegados y de cooperación. Hoy es un interlocutor reconocido por la Comisión Europea. La prueba es que hemos firmado todos juntos, con la Comisión, un acuerdo de asociación muy importante entre la Comisión y cada una de estas agencias de los Estados miembros, con el objetivo de hacer de estas agencias los actores privilegiados de la gestión delegada de los fondos europeos. Es, actualmente, un actor reconocido con una auténtica competencia técnica, que tiene valor, tanto para las agencias, evidentemente, como para la Comisión Europea, que tiene un interlocutor al que puede dirigirse para este tipo de cuestiones.
Yo creo que nuestro valor principal y el trabajo que ya hemos empezado a realizar y el que todavía queda por cumplir, es el de reforzar, todavía más, la coordinación entre agencias de la red Practitioners’ Network. Porque seremos eficaces, entre nosotros, y además seremos capaces de demostrar a la Comisión Europea que trabajar con las agencias de los Estados miembros es un valor añadido.
En mi opinión, la Comisión Europea, espera que seamos capaces de demostrarle que somos realmente eficaces, por todo ello, yo creo que la red de Practitioners’ Network debe continuar desarrollando las buenas prácticas, la estandarización entre todas las agencias y el establecimiento de nuevos procedimientos.
-
21 octubre 2016
Posteado en : Opinión
El próximo lunes, 24 de octubre celebramos el Día Mundial de Información sobre el Desarrollo. Ángel González Suárez, Técnico de la FIIAPP (Comunicación- Cooperación Española), nos cuenta lo que supone la comunicación y cómo podemos comunicar.
Hace unas semanas pude leer una entrevista al antropólogo Arturo Escobar. En ella se recogían sus ideas sobre muchos temas, entre ellos, el papel de los expertos y las redes sociales. Se mostraba crítico con la capacidad de transformación social de estos cauces de comunicación y no dejaba en buen lugar a los especialistas. Reflexionando sobre sus afirmaciones, me quedé un poco ‘en tierra de nadie’, porque si bien me parecieron acertadas, mi experiencia me puso sus reparos.
Hoy todos somos expertos en algo. Habrá quién no lo haya asumido (aunque nuestra navegación, cada vez más especializada y segmentada gracias a Google, lo desmiente), pero las categorías, las etiquetas y las palabras clave van a continuar con nosotros en nuestra realidad digital. Y hasta cierto punto es bueno que haya expertos, no porque se les tenga que emular o alabar, sino porque su experiencia puede ser muy importante para los demás, siempre y cuando la comuniquen.
Una comunicación directa y personal
Antes de animar a los expertos en Cooperación para el Desarrollo, y especialmente a quienes no lo hayan hecho ya, a utilizar las redes sociales, aprovecho para recordar algunos medios y géneros que pueden ayudarles:
-
Blogs
Son un espacio abierto a la creación, el comentario y la interacción. En España existen varios tipos, algunos de carácter periodístico con una comunidad de contribuyentes (El País o el eldiario.es), otros que nacen desde el ámbito de las ONGD (Pobreza Cero , la Fundación CIDEAL y los de muchas ONGD españolas), de los Organismos Internacionales (Banco Mundial) o la Administración Pública Española (el MAEC, que además ha realizado un documento importante en Diplomacia Digital, la FIIAPP, o el portal de la Cooperación Española, cuyo trabajo me gustaría potenciar).
-
Videoblogs
Es un género que aún no ha calado en nuestros expertos. Tiene un alto grado de exposición pública (de ahí la influencia de los youtubers) pero también puede generar una empatía mayor con el público, más que a través de la palabra escrita. (No conozco ejemplos españoles, ni en español, que centren su contenido en Desarrollo, así que no dudéis en destacarlos en los comentarios).
-
Redes Sociales
La utilización de las redes depende mucho de las características de cada una. No es lo mismo Twitter que Instagram, Facebook que LinkedIn. Recomiendo empezar por Twitter debido a su sencillez. Del buen hacer de sus usuarios en esta última hay muchos ejemplos, en @CooperacionESP tratamos de seguir múltiples cuentas que utilizan estilos y objetivos diversos. Merece la pena revisar bastantes perfiles antes de confeccionar el propio, y siempre, mucho mejor si se camina poco a poco.
A pesar de ello, muchos expertos, principalmente los que trabajan dentro de las instituciones públicas, apenas usan estos medios para transmitir su conocimiento. Sé que es difícil y que hay motivos sólidos por los que no lo hacen:
- Falta de tiempo.
- Temor a la exposición pública.
- Autoexclusión de las tareas de comunicación.
- Rigidez de la estructura institucional.
- Falta de confianza en las propias habilidades.
Sin embargo, no sólo creo que esto es un error, sino que si se potenciase el uso de las redes sociales servirían para mejorar la comunicación institucional.
Comunica lo que sabes hacer
Os pongo un ejemplo. Hasta hace poco tuve la suerte de compartir mi espacio de trabajo con varios expertos en diversas materias, todas relacionadas con la Cooperación para el Desarrollo.
Nunca antes había tenido la oportunidad de conocer la política de género española, ni las implicaciones y el grado de detalle que necesita la cooperación multilateral. Lo mismo me pasó con la coordinación de donantes dentro de la OCDE, los flujos de Ayuda Oficial al Desarrollo, el proceso de coordinación de cualquier posición que represente a España, la apuesta por mejorar los sistemas de salud y la atención a la infancia en otros países, o la necesidad de evaluar mejor nuestro trabajo.
Cualquier persona debe conocerlo, especialmente si lo estás sufragando con tus impuestos. La diferencia entre cualquier otro y yo es que yo tuve acceso a un experto.
La Cooperación Española tiene un gran panel de expertos. Lo he ido comprobando en los últimos dos años. Tienen experiencia en otros países, conocimiento, una buena red de contactos y mucho material documental acumulado (del que no se encuentra en la red). Comunicativamente hablando, son un filón. Creo que pueden mejorar las comunidades existentes y fortalecer la implicación social con la Cooperación, que ya de por sí es alta.
La implantación de un sistema de comunicación fácil para los expertos de las Administraciones Públicas no es nada del otro mundo, Francia y el Reino Unido ya lo han hecho, y nuestros expertos también, por ejemplo en el ámbito de la Educación para el Desarrollo. Por eso me gustaría que los especialistas y técnicos se impliquen más en la comunicación. Su tiempo es oro. No me cansaré de decirlo, tienen lo más importante: conocimiento. Trasladarlo es mucho más fácil.
Fijaos en Natalia Lizeth López López. Estoy convencido de que se convertirá en una experta, de hecho ya es una buena comunicadora que no conoceríamos sin Youtube. Lo mismo ocurre con muchos activos de la Cooperación Española. (Por cierto, y ésta es la clave, el enlace me lo ‘comunicó’ una de sus especialistas).
Escrito por Angel González, FIIAPP (Comunicación- Cooperación Española)
-
-
18 junio 2015
Posteado en : Opinión
EUROsociAL, el programa de la Comisión Europea para la cohesión social en América Latina, ha participado en las Jornadas Europeas de Desarrollo en Bruselas.
2015 es un año clave para la cooperación. Designado el año europeo del desarrollo por la Unión Europea; en el ecuador llegó su evento bandera, las jornadas europeas del desarrollo que reunieron en Bruselas a personas procedentes de cinco continentes, con destacada presencia de África (exceptuando la lógica mayoría europea), decenas de instituciones públicas (también evidente mayoría de la Unión Europea), agencias bilaterales y organismos internacionales, no tantas ONGDs como se esperaba y poca pero mediática aparición del sector privado, con especial atención a Melinda Gates y su Fundación con los temas de salud por bandera.
3 auditorios, 16 laboratorios (o pequeñas salas de conferencias), 5 puntos de encuentro, 44 stands, 4 espacios de prensa y 2 platós de televisión; muchas cámaras de fotos, y bastante gente, sin llegar a ARCO o a FITUR por poner un ejemplo cercano. En definitiva, toda una feria de la cooperación.
Pero más allá de la puesta en escena, se podía aprender mucho de los demás, e invitar a que los demás se interesaran por los temas que EUROsociAL propuso en Bruselas: Europa y América Latina, sus relaciones de cooperación, las políticas de cohesión social, y la realidad de ambas regiones durante la crisis y en el momento actual. Una interesante “excepción” temática y geográfica en una agenda más enfocada a África y Asia y a sectores como migración, salud y seguridad alimentaria.
Del resto, muy relevante el tema de la desigualdad donde la FIIAPP también participó junto a think tanks como ODI y DIE, y al Banco Mundial; la equidad de género con presencia de la AECID; los derechos sexuales y reproductivos; la crisis del ébola; la seguridad alimentaria con un stand impactante de la FAO (incluidas las macetas neumáticas made in Guatemala); y las frescas propuestas de los jóvenes líderes internacionales.
Un ir y venir de gente (más white collar que look onegero) salpicado con actuaciones musicales, exposiciones fotográficas, entrevistas improvisadas… en un evento con espíritu paperless al que le faltó (o le falló) la ayuda tecnológica ya que el wifi no estuvo a la altura del despliegue de los organiser, como se les llamaba en Bruselas a las instituciones participantes.
Este año decisivo para el desarrollo nos entregará otros tres hitos fundamentales: la 3ª conferencia sobre la financiación del desarrollo (Addis Ababa, Etiopía, 13-16 julio); la cumbre especial sobre desarrollo sostenible (Nueva York, 25-27 septiembre) donde se deben aprobar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y la cumbre sobre el cambio climático (COP21, París, diciembre).
Por lo que respecta a los #EDD2015, ya miran al 2016.
Por Enrique Martínez, responsable de comunicación y visibilidad de EUROsociAL