17/04/2015
Un grupo de cinco expertos marroquíes en Derechos Humanos (DDHH) conoce el trabajo de diferentes instituciones españolas en la defensa de los DDHH bajo el paraguas de un proyecto de cooperación financiado por la Unión Europea (UE) y gestionado por la FIIAPP.
Delegación marroquí en el Ministerio del Interior junto al experto de la FIIAPP y coordinador del proyecto en terreno, Diego Blázquez (dcha).Moroccan delegation at the Ministry of Interior with the FIIAPP project expert and coordinator on the ground, Diego Blázquez (right).
Esta semana, se desarrolla en Madrid la primera visita de estudio de Marruecos a España en el marco del proyecto de cooperación “Refuerzo de las capacidades organizativas y técnicas de la Delegación Interministerial de los Derechos Humanos (DDHH) en Marruecos”. Un total de cinco trabajadores de esta Delegación están conociendo el trabajo de diferentes instituciones españolas en materia de garantía y regulación de los DDHH.
El Centro de Estudios Políticos y Constitucionales (CEPC), el Congreso, el Senado, el Defensor del Pueblo, el Ministerio del Interior, de la Justicia y de la Salud son los organismos visitados por la Delegación. Esta es la primera visita que lleva a cabo Marruecos durante este proyecto financiado por la UE y gestionado por la FIIAPP, que arrancó a principios de 2015.
“El proyecto pretende fortalecer una institución central para el desarrollo de los Derechos Humanos en el nuevo marco constitucional marroquí”, explica sobre el objetivo del proyecto Ángel Sánchez, director español de este proyecto y Subdirector General de Publicaciones y Documentación en el Ministerio de la Presidencia. Marruecos cuenta con una nueva Constitución desde hace cinco años y la Delegación Interministerial de los Derechos Humanos surge en 2011 con el fin de promover los DDHH entre las instituciones marroquíes y la sociedad civil, así como mostrar el compromiso que ha adquirido Marruecos al respecto.
“Marruecos ha comenzado un proceso de ratificación de Tratados Internacionales en materia de Derechos Humanos. Por lo tanto, se encuentran, por una parte, con cuestiones de armonización de su propia normativa, es decir, adecuar la legislación marroquí: códigos penales, procesales, etcétera; a los compromisos internacionales derivados de la Constitución y de esos Tratados; y por otra, tienen la necesidad de elaborar informes del cumplimiento de esas obligaciones internacionales”, añade Sánchez sobre las necesidades de la Delegación.
“Vamos a trabajar sobre determinados derechos para consolidarlos en el ámbito de las prisiones, de mediadores y servicios públicos”, señala Abdelaziz Karraky, miembro de la delegación marroquí y Director de la Coordinación y Promoción de los DDHH, sobre el trabajo que iniciarán en Marruecos tras conocer in situ la experiencia española.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 900.000 euros y una duración de dos años. Durante este tiempo, España también tratará con Marruecos la formación de expertos en la materia, ya sea en Universidades o con formación especializada. “Necesitan crear una masa crítica de personas formadas en DDHH que puedan desplegar su actividad de garantía tanto dentro como fuera de las instituciones”, concluye el director español de este hermanamiento.
