12/06/2013
La FIIAPP ha presentado en Casa Arabe un estudio sobre migración y desarrollo en Africa
El estudio “Desafíos y prioridades de las Administraciones Públicas de Cabo Verde, Costa de Marfil, Marruecos y Senegal en materia de migración y desarrollo”, llevado a cabo en el marco del proyecto MeDAO, formula una serie de recomendaciones y de orientaciones para apoyar la importante acción de los migrantes en sus países de origen.
La coordinadora de MeDAO, Marzia Cardinali, ha explicado que el principal objetivo del programa es favorecer los vínculos entre la migración y el desarrollo. Según el estudio, sólo el 20 por ciento de la población mundial cuenta con la protección social adecuada y “este es un derecho básico que varía proporcionalmente al desarrollo de cada país”. Por ello, la falta de de protección social afecta a la mayoría de los migrantes Sur-Sur.
El estudio pone de relieve como conclusión general, que Cabo Verde, Costa de Marfil, Marruecos y Senegal tendrían que implicarse tanto en la ayuda a los procesos de integración de su diáspora en los países de destino, como en su movilización para el desarrollo del país de origen.
En el acto también han participado los embajadores de Cabo Verde, Costa de Marfil, Senegal y un representante de la embajada de Marruecos. En representación del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación han asistido José Manuel Albares, Subdirector General de África Subsahariana,y Diego Nuño, Subdirector General de Asuntos Migratorios. El acto en Casa Arabe lo ha abierto el director de la FIIAPP, Javier Quintana y ha concluido el investigador Gonzalo Fanjul.
Los migrantes como motor de desarrollo de los países de origen
El Banco Mundial afirma que las remesas de los emigrantes recibidas en los países en desarrollo ascendieron a 325.000 millones de dólares en 2010, lo que excede ampliamente el volumen de los flujos de Ayuda Oficial al Desarrollo y constituye más del 10% del Producto Interior Bruto (PIB) en muchos países en desarrollo. Siempre según los datos del Banco Mundial, la migración y las remesas reducen la pobreza en las comunidades de origen y generan mayores inversiones en salud, educación y en el emprendimiento a través de la creación de pequeñas empresas.
Los migrantes son, por lo tanto, fuente de valor, comercio e inversiones, así como de conocimientos y de transferencia de tecnología. Sin ningún lugar a duda, los migrantes internacionales son un importante motor de desarrollo de los países de origen, de ahí la necesidad de contar con políticas públicas que permitan maximizar el impacto positivo de la migración.
Es en este contexto donde se desarrolla el proyecto MeDAO, liderado por la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAPP) y cofinanciado por la Unión Europea y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), que tiene por objetivo el fortalecimiento de las capacidades de las administraciones públicas de Cabo Verde, Costa de Marfil, Marruecos y Senegal en materia de remesas, vínculos con la diáspora, así como de protección social y empleo.