29/05/2023
Esta visita permitirá establecer vínculos entre instituciones homólogas de Asia Central y España, cuyos especialistas intercambiarán experiencias y conocimientos en materia de políticas de drogas
Delegados de instituciones de Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán -países clave en la ruta de la heroína hasta Europa- inician hoy una visita de estudios en Madrid y Barcelona con el fin de conocer la experiencia española y mejorar su capacidad institucional para desarrollar, coordinar y aplicar políticas en materia de drogas, así como conocer los servicios de prevención, tratamiento y reducción de daños que lleva a cabo España en relación al consumo problemático de drogas.
En el marco del programa europeo CADAP, los expertos y expertas de la delegación visitarán la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad, diversos recursos de la Subdirección General de Adicciones de Madrid Salud del Ayuntamiento de Madrid, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) del Ministerio del Interior, el Centro Penitenciario Madrid VII de Estremera, el Programa de Adicciones, VIH, ITS y Hepatitis Virales y varios recursos de la Agencia de Salud Pública de Cataluña.
Para el director de CADAP, Ernest Robelló, esta visita “pone de manifiesto la importancia de la coordinación internacional en la aplicación de las políticas de drogas basadas en evidencias que se llevan a cabo en el seno de la UE, especialmente teniendo en cuenta el carácter transversal de esta problemática y sus diferentes implicaciones”.
Esta visita pretende, por tanto, dar a conocer las políticas que en materia de drogas lleva a cabo un Estado miembro de la Unión Europea desde un enfoque integral que abarca tanto la arquitectura institucional existente en España, como las iniciativas que del lado de la reducción de la demanda y de la oferta se aplican.
Para Peggy Martinello, directora del área de Administración Pública y Asuntos Sociales de la FIIAPP la visita “es un foro para el aprendizaje mutuo entre instituciones homólogas de una región que presenta distintos enfoques en cuanto a la aplicación de las políticas de drogas«. En esta línea destaca la importancia de esta iniciativa para fomentar el intercambio de información a ambos lados del continente euroasiático y para favorecer la integración de las políticas públicas basadas en evidencias.
Este intercambio reforzará la cooperación institucional entre los y las responsables de las instituciones encargadas de desarrollar, coordinar y aplicar las políticas en materia de drogas. Además, la delegación tendrá la oportunidad de conocer de primera mano la atención que en materia de adicciones se presta en un centro penitenciario de la Comunidad de Madrid, el funcionamiento de centros de atención y seguimiento a las drogodependencias de Madrid y Barcelona, así como iniciativas innovadoras en la aplicación de terapias sustitutivas de opioides y reducción de daños como las que ofrece la farmàcia Bagaría Casanova en L’ Hospitalet de Llobregat o el centro REDAN La Mina en Sant Adriá del Besòs.
Además, la delegación de Asia Central visitará en Barcelona varios espacios de consumo supervisado de drogas, instancias donde se pueden consumir drogas ilícitas bajo la supervisión de personal sanitario y que funcionan en Europa desde hace más de tres décadas.
Tal y como apunta el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA) “estas instalaciones buscan reducir los riesgos de transmisión de enfermedades a través de la inyección antihigiénica, prevenir muertes por sobredosis y conectar a los consumidores de drogas de alto riesgo con el tratamiento de la adicción y otros servicios sociales y de salud”.
La delegación de Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán podrá conocer estas salas de inyección segura que buscan controlar y reducir los riesgos y daños en usuarios y usuarias drogodependientes. La existencia de estos espacios “se ha mostrado eficaz en la disminución de la mortalidad asociada a reacciones agudas por consumo de drogas”, apunta la DGPNSD.