13/11/2023
El emblemático programa de la Unión Europea, creado en 1998 para facilitar la adhesión de países a la Unión, cumple 25 años. Este año acaba de extenderse esta modalidad de trabajo a América Latina y Caribe
Un modelo nacional de trasplantes de órganos con la Organización Catalana de Trasplantes en Croacia. Normativas para el registro de la propiedad intelectual con la Oficina de Patentes y Marcas en Egipto. Sistemas de gestión de impuestos con la Agencia Tributaria en Montenegro. Refuerzo del sistema ferroviario en Ucrania con el Ministerio de Fomento. Un mecanismo de protección al consumidor en Bulgaria con la Consejería de Sanidad y Consumo madrileña.
Son solo cinco ejemplos de los 360 programas europeos de hermanamiento que la FIIAPP ha facilitado desde 1998, movilizando el talento público español para reforzar las instituciones de países socios y contribuyendo así a la internacionalización de nuestras administraciones públicas. España es el cuarto país de la Unión Europea con mayor número de hermanamientos, la mayoría en los sectores de justicia, economía verde, finanzas públicas y digitalización y más de 5000 servidores públicos han compartido su experiencia y conocimiento con instituciones de países como Rumanía, Bulgaria y Polonia.
“El programa de hermanamientos es una herramienta fundamental para una acción exterior de la Unión Europea basada en valores. El aprendizaje entre instituciones homólogas es una forma eficaz de construir respuestas conjuntas a retos compartidos, y de hacerlo en el marco de la Agenda 2030. El talento público de nuestras administraciones representa la fuerza de los diversos modelos de políticas comunes de la Unión. Especialmente en el sistema de la cooperación española es un intangible que hemos puesto en valor en la Ley de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global”, explica Pilar Cancela, secretaria de Estado de Cooperación Internacional.
“La innovación en nuestras administraciones a través de su internacionalización y el aprendizaje entre pares es una de las prioridades de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea, movilizando talento público para lograr objetivos comunes. El programa de hermanamientos ilustra la importancia que tiene la función pública para garantizar el funcionamiento del Estado, el acceso efectivo a los derechos y la cohesión social. Las políticas cada vez trascienden más las fronteras, así que las alianzas internacionales se convierten en imprescindibles para su aplicación efectiva”, destaca Lidia Sánchez Milán, secretaria de Estado de Función Pública.
«Al conmemorar las bodas de plata del instrumento de hermanamiento, celebramos los puentes que hemos tendido y los lazos que hemos formado. A lo largo de estos 25 años, junto con los Estados miembros, hemos transformado nuestros conocimientos compartidos en una herramienta de capacitación y progreso. Al tiempo que evoluciona, el Hermanamiento seguirá fiel a su misión principal de apoyar a los países socios en sus esfuerzos por alinearse con las normas de la UE y construir instituciones más fuertes y resistentes. Larga vida a la comunidad de hermanamiento», asegura Gert Jan Koopman, director general de Vecindad y negociaciones para la ampliación en la Unión Europea (DG NEAR).
“A través de los Hermanamientos, España se suma a los esfuerzos conjuntos de la UE por transmitir a terceros lo mejor de su conocimiento y talento públicos en distintas áreas. Fomentar la concienciación y apropiación de terceros actores en un campo determinado es instrumental para dinamizar y dotar de contenido a las relaciones de la UE. Los hermanamientos son, además, relaciones entre pares, que implican un grado elevado de diplomacia pública y permiten construir relaciones de confianza a largo plazo entre instituciones”, explica Ricardo Sánchez-Blanco Codorníu, Subdirector General RELEX y Asuntos Comerciales UE y punto nacional de contacto en España para los twinning.
La involucración de más instituciones estatales, autonómicas y municipales en este tipo de cooperación y la extensión del programa a nuevas áreas geográficas más allá de los países de vecindad y adhesión son los próximos retos para el programa.
“Queremos compartir con el mundo lo que mejor sabemos hacer en España y en Europa: poder normativo, instituciones sólidas y políticas públicas que protejan a sus ciudadanos, sin dejar a nadie atrás. Nuestras administraciones son generosas en este sentido, pero necesitamos más variedad, incluyendo por ejemplo a entidades locales con más fuerza y también un marco normativo que valore y facilite la participación de nuestra función pública en este tipo de programas”, explica Tobias Jung, director de Estrategia de la FIIAPP.