23/03/2018
La FIIAPP participa en el Consejo Departamental sobre esta problemática dentro del proyecto de apoyo a las instituciones bolivianas
Bolivia dispone de una Ley y Plan Nacional para lucha contra la trata y tráfico de personas. Esta ley se gestiona a nivel nacional desde el Consejo Plurinacional, en el que la FIIAPP participa de forma activa por su apuesta firme en el refuerzo y consolidación de políticas públicas y apoyo al sector público en su conjunto.
El proyecto de apoyo a las instituciones bolivianas en la lucha contra el narcotráfico y delitos conexos, que gestiona la Fundación con financiación de la Comisión Europea y la AECID, se centra en la formación de las instituciones bolivianas que pueden hacer frente a estos problemas. Miembros de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía aportan su experiencia en los campos de investigación criminal operativa, inteligencia, control de fronteras y mercancías, lavado de activos y blanqueo de capitales, trata y tráfico de personas.
Ante este último delito en concreto, la FIIAPP está apoyando una estrategia orientada a la aplicación efectiva de la ley nacional a través de procesos departamentales. Por lo que los 9 Departamentos de Bolivia tienen la obligación de establecer un Plan Departamental, elaborado desde los Consejos conformados por representantes de Policía, Migración, Salud, Educación, Trabajo, Fiscalía, Servicios Sociales y sociedad civil.
Es aquí donde el Departamento de Tarija ha solicitado su apoyo específico para la evaluación de su Plan Departamental 2014-2017 y la elaboración del nuevo Plan 2018-2021. Y por el que la FIIAPP ha participado en la reunión del Consejo Departamental de lucha contra la trata y tráfico de personas del país.
El objetivo de esta asistencia no es sólo la evaluación y elaboración de un nuevo Plan, sino impulsar una mayor eficacia e impacto de las funciones departamentales en la lucha contra la problemática. Esto se consigue a través de la mejora en la coordinación interinstitucional y la creación de un sistema de seguimiento que permita reorientar estas acciones.
Influye además el contexto cambiante del Departamento de Tarija, zona fronteriza con Argentina con un flujo muy importante de rutas de trata y tráfico de personas, principalmente hacia la explotación laboral pero también sexual.