04/10/2021
La UE refuerza los servicios de rehabilitación y tratamiento de drogadicción en las cárceles de Kirguistán a través de CADAP 7, liderado por FIIAPP
En los países de Asia Central la drogadicción, la tasa de dependencia de la heroína y la consecuente transmisión del VIH son muy elevadas. Asimismo, el tráfico de opiáceos es una de las principales fuentes de ingresos de la delincuencia organizada. Todo ello contribuye a la inestabilidad jurídica, económica y social de la región.
El programa de acción en materia de drogas de Asia Central (CADAP) es una iniciativa de la Unión Europea destinada a promover el desarrollo de políticas de reducción de demanda de drogas efectivas, basadas en evidencias y buenas prácticas con las que fortalecer las capacidades de los gobiernos de los países de Asia Central para hacer frente al fenómeno de las drogas de manera integral y sostenible. Se encuentra en su séptima fase, la cual es liderada por la FIIAPP. CADAP ha estado colaborando con Kirguistán, a través de distintas fases del programa, en la introducción de programas de tratamiento y rehabilitación para consumidores de alcohol y drogas para la población reclusa. En Kirguistán, donde el VIH se concentra en las cárceles causado principalmente por el uso de drogas inyectables, existe un programa de terapia de mantenimiento con metadona en la prisión, así como una comunidad terapéutica orientada a la abstinencia basada en el modelo de 12 pasos denominado «zona limpia» que fue una iniciativa de CADAP.
Representantes de la delegación de la UE en Kirguistán, junto con autoridades del Ministerio del Interior de Kirguistán y miembros de programa CADAP, han visitado la «zona limpia» de la colonia masculina en la prisión de Moldovanovka, y la “zona limpia” de la colonia femenina en la prisión de Stepnoe, ambas en la provincia de Chuy.
Se trata de una visita de campo que forma parte del proceso de evaluación de necesidades de esta fase del programa, en el marco de las estrategias nacionales de drogas y planes de acción penitenciaria de Kirguistán. El objetivo de estas visitas es hacer un seguimiento de la situación de los consumidores de drogas en las cárceles de Kirguistán y conocer de primera mano los retos a los que se enfrentan bajo la pandemia COVID-19.