01/10/2021
La Comisaria europea de Asociaciones Internacionales ha dialogado con ex pandilleros que lideran la lucha contra el crimen en el marco del proyecto EL PAcCTO
“Europa está con vosotros. Nuestras instituciones de seguridad y justicia están comprometidas en la lucha contra las redes criminales en América Latina, pero también contra las causas que generan esta violencia”, con estas palabras, la comisaria de Asociaciones Internacionales de la UE, Jutta Urpilainen, ha interpelado a Daniel Portillo y Antonio Sosa [nombres ficticios para proteger su identidad], que consiguieron rehabilitarse tras años de violencia y destrucción en sendas pandillas de El Salvador. Sobre los motivos que le llevaron a entrar en una pandilla, Daniel ha relatado el odio y deseo de venganza que sentía hacia su padre maltratador. Antonio ha apuntado también a razones económicas: “la necesidad de proveer para tu familia. Solo cuando pude aprender un oficio y me ayudaron con un pequeño capital para abrir una barbería pude entender que había una alternativa”.
“Los más jóvenes son carne de cañón para unas bandas cuyo criminal relato y estética se han globalizado y convertido en atractivas, y lo son tanto en el reclutamiento como a la hora del castigo. Especialmente las chicas, sobre las que suma una violencia especialmente repugnante: la sexual”, explicaba la directora de la FIIAPP, Anna Terrón. “Cualquier política pública que quiera ser eficaz en el combate contra el crimen organizado debe contar con las personas jóvenes para formular medidas adecuadas a su realidad”, ha declarado.
Jérémie Pellet, director de Expertise France -EL PAcCTO es un proyecto financiado por la Unión Europea y co-liderado por organismos de cooperación española, francesa, italiana y portuguesa- añadía: «los jóvenes son actores clave del futuro y sus voces necesitan ser escuchadas cuando debatimos políticas públicas y estrategias en todas las áreas que impactan en su presente y su futuro. Tenemos la enorme responsabilidad de empoderar a los hombres y las mujeres jóvenes para que tomen parte activa a la hora de decidir qué quieren para su futuro y cómo quieren conseguirlo”.
Adriana Tostón, comandante de la Guardia Civil y entre las 40 mejores agentes jóvenes del mundo, según la lista de la Asociación Internacional de Jefes de Policía: “tenemos que hacer que el crimen deje de compensar. Por eso hemos de dejar de limitarnos a detener delincuentes y trabajar más para desmantelar económicamente la estructura económica de las organizaciones criminales”. Tostón ponía además en valor el mayor conocimiento tecnológico de los jóvenes para afrontar el problema: “el crimen evoluciona, no podemos aportar siempre las mismas soluciones ni ser siempre los mismos los que lo hacen”.
Nicolás Zevallos, criminólogo y ex viceministro de Seguridad Ciudadana de Perú, reivindicaba políticas públicas que miren a fortalecer el tejido social “hay que desarrollar redes comunitarias y de soporte familiar para que la pandilla no sea la única salida a situaciones desesperadas”. Pilar Díaz, directora de la Fiscalía Especializada en Delitos en Razón de Género y Juvenil de Bolivia ponía el énfasis en las oportunidades educativas: «en Bolivia estos jóvenes suelen venir de entornos rurales y urbanos con grandes necesidades económicas y conflictos familiares. Es clave ofrecerles posibilidad de estudios gratuitos”.
Fabio de Gemmnis, activista de la ONG LIBERA y socio y trabajador en la cooperativa LA STRADA de Tiano -que se dedica a reconvertir a fines sociales espacios expropiados a la camorra- apuntaba a la imperiosa necesidad de que los jóvenes confíen en las instituciones: “si hablamos de justicia social y de lucha contra la pobreza, tenemos que ser coherentes, no puede haber instituciones corruptas, las instituciones tienen que ser creíbles, la relación jóvenes-instituciones tiene que crear sentimiento de comunidad, tenemos que mostrarles que contamos con ellos”.
La participación de las personas jóvenes en las políticas públicas orientadas a mejorar la vida de las personas y el planeta es una de las prioridades de la FIIAPP, en línea con la acción exterior europea.
EL PAcCTO es un proyecto financiado por la Unión Europea y gestionado por la FIIAPP y Expertise France, con el apoyo del IILA y del Instituto Camões para fortalecer la lucha contra el crimen organizado en Latinoamérica.